Hay muchos que piensan que todo en esta vida tiene un motivo por el que se da, llámalo Destino o Designio Divino, póngale la etiqueta que desee, siéntese póngase cómodo ahora le sirvo un poco de rayadura de cabeza...
Digamos que, desde hace más de un mes me siento así y se que aún me queda "programa" por delante antes de que este mareo de decisiones y cambios se calmen.
Lo que temo es acabar vomitando en sentido figurado, ya que todos tenemos un limite de zarandeos involuntarios, pero supongo que normalmente ni nosotros mismos somos conscientes de cual es el número exacto de éstos que aguantaremos.
Por un lado estoy ilusionada con parte de los cambios que asoman a la vuelta de la esquina, por otro lado asustada y temiendo que la calma no regrese.
Y usted ¿qué piensa al respecto?
Pues si se trata del lado católico de mi familia dirán que hay que aguantar y es lo que me ha tocado en esta vida (que habré hecho yo en el pasado me pregunto) y si es el lado místico de la misma, dirán que soy el sostén de la familia y que doy alegría.
La verdad me miro al espejo, observo y es entonces cuando algo en mi interior analiza los sucesos afirmando con la cabeza.
Sea lo que sea que esté por venir habrá que torearlo lo mejor posible y al igual que hay que tener paciencia para desenredar un nudo en una cadena habrá que tenerla para desenmarañar este lío que es la vida, pues es una obra en la que todos improvisamos continuamente.
