Muchos habréis pensado que me voy a Japón por navidad, pues no, siento desilusionaros a aquellos que ya estabais maquinando que pedirme para que os trajera.
El titulo de este post es porque hace tiempo que os quería mostrar las imágenes de una habitación de una niñita de 3 añitos, a las que su madre le decoró todo con motivos japoneses.
Quedando lo suficientemente infantil, "cursi" y a la vez bonito, perfecto para una pequeña de esa edad, que aún puede soñar con el principe azul y no pensar en todos los sapos que besará antes de encontrar un hombre que la complemente.
Pues sin mas dilaciones, allá van las imágenes:
La verdad es que me encantan los muebles en blanco, quedan bonitos y aunque vaya creciendo siempre podrá cambiar el color de la pared y reutilizar los muebles.
En mi opinión es una idea genial y fuera de los típicos convencionalismos a los que estamos acostumbrados en los dormitorios infantiles.
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